Portishead y Baudelaire...

Sigo escribiendo y escucho portishead, numb...me devuelvo un poco al pasado a ese lugar llamado evasión, a aquella adictiva sensasión de dejarse llevar....no se si será la canción o el recuerdo o esa sensasión o necesidad oculta que en algún momento tarde o temprano sale a flote, la necesidad de expresarse, de sacar afuera todo aquello que sobra, que oprime, que es ajeno o que pesa....es un reciclar constante, inevitable...una limpieza aburridamente cíclica....¿quién dijo que esta era yo?, ¿quién supuso que esto era lo único?....me fui río abajo o mar adentro, entre las frases entrecortadas de una voz indecifrable ya para mi, que pronunciaba un lenguaje que ya no pude ver más, o no quise seguir viendo, pues era yo voluntariamente incapaz de entenderle en vista de que mi corazón era ahora, al fin libre...cerré los ojos y vi cientos de amarras....quise huir de aquel escenario incierto y de la trémula voz que sentenciaba conjurosa los días y las horas por venir poniéndoles a cada una nombre y fin...extractos de ibsen, blake y flaubert me hicieron entrar en razón y esa noche terminaría mis horas bebiendo ajenjo frente a la imagen fría de baudelaire, como si tratara de utilizar su propia receta intentando nuevamente desasinar mi alma de aquello que llaman frialdad o dolor...